Sorpresa en el aeropuerto de Valencia por la presencia del avión de Obiang
El pasado 20 de noviembre, uno de los aviones de Ceiba, compañía de bandera ecuatoguineana, aterrizó por primera vez en el aeropuerto de València. A diferencia de los que vuelan a Madrid, su matrícula era de Guinea Ecuatorial. Un hecho que en un principio estaría prohibido, resultó de lo mas curioso. No se trataba de un avión de pasajeros convencional, sino que correspondía a uno de los aviones presidenciales de Teodoro Obiang.
Se trataba de un Boeing 767-300ER, de alcance intercontinental que perteneció en un principio a KLM. Más tarde, pasó por una empresa suiza experta en transporte VIP y que, a día de hoy, es una lujosa residencia volante que puede llegar a casi todos los lugares del mundo únicamente con una escala.
El aparato pasó unas horas en la ciudad de València y más tarde salió hacia Malabo. Gracias a un video de un aficionado a la fotografía aérea y registro de aeronaves, se puede conocer este hecho. Cruzó la pista de vuelo en uso sin autorización de los controladores valencianos, que le apercibieron más tarde de tal hecho. Únicamente segundos antes, un Boeing 737 de Ryanair había despegado por esa pista. No ocurrió nada y el avión despegó, aunque el riesgo fue innecesario debido a que no se detuvo en un punto donde hay que hacerlo si no hay autorización de la torre de control.
Su curiosa presencia se vio incrementado por coincidir en la pista con unos BMW i8, unos coches que cuestan cerca de 150.000 euros rotulados como Safety Car o coches de seguridad de las carreras de Fórmula E.
Sin embargo, lo más curioso es que lo que ocurrió con el avión de Obiang. Esperemos que no suceda de nuevo un suceso parecido, puesto que pudo desembocar en tragedia, más allá de la anécdota de la noticia.
